¿Has tenido un problema de la salud para lo cual lo has probado todo sin resultado? Fuiste al doctor, tomaste yerbas, tuviste terapia quiropráctica, acupuntura, más yerbas, más acupuntura… ¿Cuándo terminará el sufrimiento? ¿Qué más tienes que hacer para curarte? De hecho, hay algo que se puede hacer para solucionar el problema. A continuación explico qué te falta.
Vyara
Obtenemos lo que esperamos obtener
¿Está bien combinar muchas terapias para curarte (más) rápido? La verdad es que no se trata de lo que vamos a combinar sino del por qué. ¿Por qué quieres visitar tantos curadores y doctores? ¿Será porque te gusta llamar la atención? Si esa es la razón, entonces la repetición de tu historia (de pobre sufridor) solo reforzará la enfermedad. ¿O será porque no confías en la terapia y te parece bien tener un plan B y después respaldarlo por si acaso? Si este es el caso, añadir una terapia más no te ayudará dado que obviamente no tienes confianza en el proceso de curación. Y ya sabes que dicen: si crees que puedes hacer algo o no, tienes razón. Ahora, ¿crees que puedes curarte o no?
Entonces, lo más importante de cualquier terapia que recibas es esperar resultado y creer en ello. Y no cualquier resultado. Se trata de esperar un resultado muy específico dentro de una fecha también específica. Por ejemplo, en vez de esperar que te mejores pronto, crea en tu habilidad de caminar 10 kilómetros sin ningún dolor de la rodilla derecha el 3 de abril.
Como he dicho varias veces ya, no se trata de lo que hacemos sino del por qué. Indudablemente si recibes una terapia creyendo en su poder de despertar tu habilidad innata de curarte a ti mismo, puedes dedicarte a lo que quieras y curarte sin problemas. Lo más importante de cualquier práctica de curación es la persistencia y la creencia en que dicha práctica te ayudará a obtener tus metas específicas dentro de un plazo específico. Así, puedes utilizar la técnica de respiración 4×4 durante 8 días para curarte del síndrome de intestino irritable (dado que eso es lo que te has comprometido a alcanzar, en tu corazón y en papel). Después puedes practicar la misma técnica de respiración 4×4 y curarte de depresión (si es que la curación de depresión dentro de 10 días es tu compromiso nuevo, en el fondo de tu corazón y también en papel). En fin, es la creencia en la técnica más que la misma técnica que lleva los resultados.
Entonces antes de tirarte en el mundo de la terapia infinita, examina tus expectativas primero. ¿Cuáles son los resultados específicos que esperas obtener y, sobre todo, dentro de qué fecha límite? Escríbelo todo en papel para transformar tus esperanzas vagas en metas concretas. Y no extiendas el plazo más de 30 días (para no relajarte y perder el foco). Cuando hayas escrito tus metas y te hayas comprometido a alcanzarlas, la curación ya está en marcha. Ahora puedes elegir tu terapia favorita para despertar tu poder innato de curación. Recuerda que la curación la haces tú mismo con tus creencias, no la terapia. Y si crees que puedes o no, tienes razón.